El cáncer se considera una de las enfermedades más comunes de nuestros tiempos. Se trata del crecimiento de células mutadas en el organismo y desde los 90, es curable en casi el 50% de los casos a través de distintos tratamientos oncológicos.
El cáncer más frecuente en las mujeres es el cáncer de mama; una de cada ocho mujeres lo desarrolla a lo largo de su vida. La supervivencia a este tipo de cáncer ha mejorado con el paso de los años. Las pacientes que padecen cáncer sufren distintos trastornos tanto físicos como psicológicos causados por la enfermedad y los tratamientos oncológicos utilizados para superarla: caída del pelo, de las cejas y pestañas, hipersensibilización de la piel, erupciones, etc.
Debido a ello, estas personas sufren una disminución de la autoestima y el uso terapéutico del maquillaje puede ayudarlos a que se sientan mejor con ellos mismos.
Debe tenerse especial cuidado a la hora de escoger los productos que se usan. Una de las cosas más importantes es que éstos sean hipoalergénicos, para que no causen ninguna reacción alérgica inesperada.
Si eres un maquillador profesional y te interesa poder ofrecer tus servicios a pacientes oncológicos, TEN IMAGE ha recopilado una serie de consejos:
La higiene… ¡fundamental!
Para una correcta aplicación y fijación del maquillaje, antes tenemos que limpiar bien el rostro. Se aconseja que la paciente se lave la cara con agua tibia y un limpiador con textura gel y neutro como el Gel crema desmaquillante. A la hora de secar la piel, no frotes; seca el rostro con la toalla dando suaves toquecitos. También puedes impregnar un algodón en agua micelar y pasarlo por la cara, tratando de no estirar la piel.
Hidratación
Durante los tratamientos oncológicos, la piel de los pacientes se vuelve mucho más seca y sensible. Por ello, es muy importante la hidratación. Se aconseja que las cremas no sean desengrasantes, tampoco que tengan sustancias químicas que irriten la piel, como siliconas o parabenos. Es mejor apostar por cremas que incorporen principios activos calmantes. Y, algo que se nos olvida cuando ya se pasa el verano… ¡la protección solar! Sería genial que la crema hidratante que apliquemos tenga algo de protección solar para salvaguardarse de los efectos del sol.
Correción de imperfecciones
Los tratamientos oncológicos hacen que la piel sufra más de la cuenta y pueden aparecer ojeras, erupciones, manchas en el rostro, etc. Pueden corregirse con los correctores de maquillaje Cover Adapt: usando el corrector verde contrarrestaremos el tono rojizo de algunas zonas de la cara y empleando el amarillo disimularemos las ojeras azuladas o tonalidades moradas. Aplicaremos el corrector melocotón para rebajar el tono de las zonas más hiperpigmentadas.
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Encuentra el fondo de maquillaje correcto
Ya que la persona estará más pálida de lo normal, la base que apliquemos le aportará un favorecedor color saludable. Ahora bien, debemos escoger un tono adecuado, lo más natural posible. La aplicación del maquillaje tiene que ser muy cuidadosa y se debe extender muy suavemente con una Esponja de maquillaje anatómica… ¡nunca se te ocurra frotar! Su piel es hipersensible y puedes hacerle daño. Aplícalo a partir de pequeños toquecitos humedeciendo la esponja para darle una textura aún más agradable. Y luego dale un matiz de color con un colorete.
¡Ilumina el rostro!
Aplica un iluminador corrector para eliminar líneas de expresión y de cansancio. Aplícalo justo debajo de los ojos para así neutralizar las ojeras. Y luego, acentúa los puntos de luz del rostro para darle más vida.
Fija el maquillaje
Utiliza unos polvos, como el polvo traslúcido, que ayuden a fijar el fondo y absorber el exceso de grasa para que no aparezcan brillos. Este paso se puede omitir en personas que tengan la piel excesivamente seca, ya que la puede resecar más.
Corrección de cejas
Como hemos dicho anteriormente, los tratamientos oncológicos pueden producir la caída del pelo y, por lo tanto, algunas pacientes se quedan sin cejas… Podemos dibujarlas usando de un lápiz de cejas y luego ir disminuyendo el trazo para que quede más natural. O también, simular el pelo con los correctores de cejas.
¡Da vida a los ojos!
Puedes utilizar cualquier tipo de sombra, siempre y cuando sea hipoalergénica. Opta por aquellas más brillantes, ya que dan más luz a la mirada. Y luego, realiza el delineado y difumínalo… ¡verás como el ojo cobra vida de golpe! Al igual que las cejas, también se caen las pestañas, por lo que si a tu clienta se le han caído las pestañas, maquilla la línea del ojo y así conseguirás más profundidad.
Maquilla los labios
Debido a los tratamientos oncológicos, los labios se agrietan y resecan más de la cuenta. Por eso, opta por un labial que tenga componentes hidratantes. Olvídate de aplicar labiales mates ya que dañarán la piel de tus labios. Siguiendo este consejo, se puede aplicar el tono que se desee, mientras combine con el resto del maquillaje.
Las secuelas de un cáncer y de sus tratamientos afectan terriblemente a la autoestima. Dicen que cuando te ves bien, te sientes mejor. El maquillaje puede ayudar a estos pacientes a recuperar la seguridad que tenían en ellos mismos y a quererse de nuevo.
Hoy, 19 de octubre de 2016, se celebra el día contra el Cáncer de Mama. Como dice la AECC, la celebración de este día se produce “para destacar mensajes concretos relacionados con la detección precoz del cáncer de mama. Una oportunidad que permite que el mensaje de salud salga a la calle y llegue al conjunto de los ciudadanos, mujeres, varones niños y jóvenes.”
