La decoración y el ambiente del centro de estética es más importante de lo que nos imaginamos: hay que buscar la armonía y el equilibrio entre formas y colores.
La clienta acude al centro de estética a relajarse y aliviar tensiones. El ritmo frenético de la sociedad actual puede provocarnos distintos problemas en nuestro interior que acaban exteriorizándose a través de nuestro cuerpo.
Sólo con la ambientación y decoración de tu estética puedes ayudar a que tu clienta se sienta relajada nada más poner un pie en tu centro.
1) Ambiente zen
De lo que se trata es de garantizar un estado emocional de paz y tranquilidad a través del orden, la decoración a partir de colores claros y líneas muy simples.
Los colores son muy importantes
Utiliza principalmente una gama de colores claros, normalmente blancos, que se combinan con colores más neutros como el beige, el ocre, el gris o el marrón. Estos últimos utilizados más bien en los objetos decorativos o a través de pequeños detalles.
Materiales naturales
La madera o las piedras en un mobiliario simple, de baja estatura y con líneas más bien rectas que curvas, te ayudará a dar impresión de orden y le dará un toque minimalista a tu estética.
Iluminación cálida y sutil
Huye de las luces frías y apuesta por luces cálidas. Apuesta por una iluminación baja y suave, para crear un ambiente entrañable mediante luces indirectas. Y, si tienes ventanas grandes que dejen entrar luz natural… ¡aún mejor!
2) Aromas suaves
El aroma a incienso, velas aromáticas suaves o los aceites esenciales serán ideales para crear esa atmósfera de paz.
3) Los tejidos
Utiliza tejidos naturales como el algodón, el lino o la seda. Los tejidos también ayudan a crear confort. Y, ¿por qué no? añade tu sello diferencial a las toallas y hasta a la camilla estampando el logotipo de tu centro.
4) Limpieza
La limpieza, como en todos los trabajos, será primordial. No sólo la de tu centro, sino también la tuya propia. Luce siempre un uniforme impoluto, manos cuidadas, cabello recogido y un maquillaje sutil y cuidado. No sólo es la decoración de tu centro la imagen del mismo, tú también lo eres. Por supuesto, el tipo de servicio que ofreces es importante, y puedes diferenciar tu centro con tratamientos temporales y acordes a la época del año, como por ejemplo tratamientos estéticos para invierno.
5) Sala de espera y recepción
Ten un lugar apropiado para que tus clientas esperen antes de entrar a realizarse su tratamiento. Y otro especial para recibirlas. Normalmente coinciden, así que asegúrate de que aparte de comodidad, tengan algo con lo que entretenerse en el caso que tengan que esperar.
- Flyer con una lista de los servicios que ofreces o incluso las promociones especiales para tu centro de belleza.
- Tarjetas de visita.
- Folletos de la línea o líneas de productos con los que trabajas.
- Revistas de belleza y moda.
- Perchero/s para que coloquen sus pertenencias si lo desean mientras esperan.
- ¿Tienes televisión? Emite un vídeo corporativo, vídeos de la línea profesional con la que trabajas o imágenes en movimiento que intercalen tus novedades, promociones y noticias sobre tu centro.
- Utiliza las estanterías cercanas a la recepción para los expositores de los productos de venta y al cobrar, después del súper tratamiento que les habrás realizado, ofréceles el producto que mejor les funcione.
- Ofréceles agua, té o café a tus clientes en tacitas monas que también concuerden con el estilo de tu centro. Las clientas valoran muchísimo el que les ofrezcas algo de beber nada más entrar.
6) Estimula a tus clientas con la música
Aporta calidez a tu salón de belleza y procura la relajación y el bienestar de tus clientes a través de la música. Dedica un día a seleccionar música que encaje con el estilo de tu centro y que te ayude a crear la atmósfera que buscas según el tipo de servicio que estés ofreciendo.
- No pongas la música a todo volumen, utilízala siempre en segundo plano.
- Opta por estilos como el chillout, el jazz, el piano, la bossanova… todo dependerá del estilo de tu centro, servicio y público.
- Huye de canciones y melodías tristes y nostálgicas. Apuesta por aquellas que motiven e inciten al positivismo.
- En la sala de espera, opta por una música agradable, con un ritmo más rápido.
